La relación con mamá marca tu feminidad, tu relación con la maternidad, tanto biológica como creativa, tu sexualidad, tu anclaje en la tierra y tu conexión con lo sutil. Sanar la relación con la madre es una tarea difícil porque nos debatimos entre la lealtad a ella y la necesidad de ser nosotras mismas. Y ese ser nosotras mismas implica asomarnos a la posibilidad de rechazo por parte del clan familiar. Pero si no lo hacemos pagamos un precio muy alto, no podemos descubrir quiénes somos realmente y que queremos hacer con nuestra vida.

La herida de abandono y las relaciones adictivas
El dolor de una ruptura o una relación ambigua nos puede conectar con una herida que llevamos dentro, y es la herida de abandono. No